Cómo aplicar un autobronceador: la guía
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Saber aplicar el autobronceador es todo un arte. Zonas a parches, cabellos teñidos, fronteras que revelan las áreas que has olvidado, e incluso tu pijama favorito con manchas insalvables. Todos ellos problemas típicos de personas con poca paciencia (o experiencia) con este producto cosmético.
Si lo haces mal, puedes estar tirando un buen producto a la basura (y encima, echarle la culpa a él del fracaso de tu experimento). Así que la próxima vez que apliques tu autobronceador, si quieres triunfar, no te queda otra que leerte el manual de instrucciones.
Un fake tan perfectamente uniforme y de apariencia natural es posible con la ayuda de algunos preparativos y los productos adecuados. En esta guía encontrarás todo lo que necesitas saber para aplicar el autobronceador y parecer una diosa del Olimpo en lugar de un Cheeto.
¿Qué debes saber antes de aplicar un autobronceador?
Sí, el autobronceador te ayuda a aparentar una piel besada por el sol, pero no protege de los rayos solares. No te olvides de usar una crema solar cada día.
Por otro lado, si estás utilizando retinol o ácidos, deja de hacerlo: estos activos van a cargarse el tono que hayas podido conseguir. Para conseguir un color duradero, utiliza un limpiador suave y mantén tu piel bien nutrida con una buena crema hidratante.
¿Cómo se aplica un autobronceador?
Para aplicar un autobronceador correctamente hay que seguir una serie de pasos que no te puedes saltar. Si eres principiante, no te preocupes: es posible conseguir un buen tono de piel sin ser una experta. Eso sí, te recomendamos que empieces con un autobronceador de tono claro, y dejar los oscuros para cuando domines más este producto.
A continuación, así es como se aplica el autobronceador para conseguir el mejor resultado.
1. Elige bien tu tipo de autobronceador
Hay muchísimos tipos de autobronceadores ahí fuera: desde fórmulas express que aportan resultados visibles en una hora, hasta otras más progresivas para las menos atrevidas. También los hay para cuerpo, para rostro, o algunos que son aptos para ambas áreas. Sin olvidarnos de los múltiples formatos que existen: lociones hidratantes, mousse, brumas, geles y gelatinas…
Tu elección dependerá básicamente de tus gustos, aunque si tienes la piel seca te recomiendo una fórmula hidratante, como una loción o crema.
2. Exfolia
La exfoliación permite crear un lienzo limpio como base para aplicar un autobronceador y conseguir un resultado natural y sin parches. De este modo, retiramos las células «viejas» que están a punto de desprenderse de la piel y el autobronceador pigmentará las que estén debajo para un resultado más duradero.
Métete en la ducha y utiliza uno como este de Biotherm, sin aceites que puedan interferir luego con los ingredientes del autobronceador. También puedes utilizar un cepillo de madera exfoliante antes de limpiar tu piel en profundidad. Masajea la piel mediante movimientos circulares y aclara con mucha agua: necesitamos una piel muy limpia y sin ningún tipo de residuo.
3. Seca la piel y aplica una crema hidratante en áreas clave
Una vez hayas salido de la ducha y con la piel completamente limpia, sécate bien con una toalla y espera a que no quede ni una gota de humedad.
Ahora toma un poco de loción hidratante y úntala sobre codos, aletas de la nariz, rodillas… Todas esas áreas que suelen absorber más pigmento del habitual y tienen tendencia a adquirir un tono más oscuro al resto (de este modo evitarás manchas naranjas).
4. La aplicación
Antes que nada, empieza por broncearte la cara. Aplica el producto sobre todas las superficies visibles de la cara, excepto las mucosas: en los párpados, altos de las orejas, an la punta de la nariz… no te dejes ni un rincón. Lávate las manos rápidamente para impedir que se formen manchas. Si pasas de líos, mejor opta por un autobronceador para la cara.
Una vez pasamos al cuerpo, es mejor comenzar por las piernas y con el uso de un guante aplicador: desde el tobillo, masajéalas hacia arriba, pasando por la rodilla y hasta llegar a los muslos. Utiliza el producto sobrante para broncear los empeines de tus pies.
El resto es fácil: aplica producto de manera generosa sobre escote, senos, abdomen, espalda y nalgas. Por último, los brazos. No te olvides de los antebrazos y axilas: una vez hayas terminado con ellos, utiliza el producto sobrante para las manos. Luego humedece ligeramente un trozo de papel higiénico y repasa las zonas con más pigmento que las otras.
5. Deja que se seque
Una vez hayas terminado con la aplicación del autobronceador, deja que se seque al aire por un mínimo de 10 minutos (o lo que ponga en el envase) antes de vestirte, mejor si es con ropa holgada y oscura. Si tienes la posibilidad, déjalo secar durante un poco más de tiempo para evitar manchar tu ropa o los tejidos a los que más cariño tengas de tu casa.
Si puedes, evita la sudoración mientras se esté secando el producto (el agua arruina la uniformidad conseguida en la aplicación cuando todavía se está asentando el producto).
6. Aclara con agua
Cuidado, es posible que no necesites llevar a cabo este paso, pero si has elegido un autobronceador con aclarado, deberás retirarlo con agua después de las horas que marque el envase.
Asegúrate de que has conseguido el tono deseado antes de meterte en la ducha, de lo contrario, podrías interrumpir el proceso antes de obtener una piel visiblemente bronceada.
7. Protege tu piel del sol
Los autobronceadores no tienen SPF, y por lo tanto no ofrecen ningún tipo de protección solar (bueno, si se trata de un protector solar con autobronceador sí).
Además, recuerda que este tipo de producto no estimula la producción de melanina de tu piel, sino que tiñe las células más superficiales. No tienes ningún tipo de resistencia mayor a las quemaduras solares, así que no te olvides de usar tu protector solar siempre que te expongas a los rayos solares.
8. El mantenimiento
Hidratación y más hidratación. Para mantener un color bonito y duradero, no hay mejor técnica que tener la piel siempre bien hidratada. Esta crema hidratante de CeraVe puede convertirse en tu gran aliada.
¿Puedo ducharme después de usar el autobronceador?
Sí, puedes ducharte, pero no de inmediato. Recuerda que el agua puede afectar al resultado final si todavía no se ha secado el producto por completo. Para evitar desvanecer el tono que hayas podido conseguir antes de tiempo, debes esperar los minutos u horas que se indican en las instrucciones del envase.
¿Cuánto tiempo debe dejarse secar el autobronceador?
En general, los autobronceadores tardan un par de minutos en secarse por completo. Puedes vestirte cuando sientas que la piel no desprende producto al tacto. Las fórmulas ligeras o en formato gel tardan menos en secarse que aquellas más cremosas.
Aún así, cada producto es un mundo. Mira las instrucciones en el dorso del producto para asegurarte de cumples con los tiempos de secado para evitar manchas en la ropa.
¿Cuánto tiempo dura el efecto del autobronceador?
El efecto de un autobronceador comienza a desvanecerse a partir del día siguiente de la primera aplicación de forma progresiva, durante unos 7 días aproximadamente. Esto se debe a la renovación celular que lleva a cabo nuestra piel de forma natural: las células viejas (que son aquellas «teñidas» por el autobronceador) se desprenden con el paso del tiempo.
También dependerá de si llevamos a cabo algunos cuidados clave para prolongar el bronceado, como el de utilizar una crema hidratante de forma regular y evitar productos exfoliantes, tanto físicos como químicos, así como cualquier tipo de aceite que podamos aplicar sobre la piel.
¿Cómo aplicarlo en zonas difíciles como la espalda?
Aplicar un autobronceador de forma exitosa en la zona central de la espalda puede resultar todo un reto, sobre todo para aquellas personas cuyo fuerte no es la flexibilidad.
La opción más efectiva es pedir ayuda externa, evidentemente. Si no contamos con esa posibilidad, puedes probar con una bruma autobronceadora. O hacer uso de tu desbordante creatividad y construir una herramienta con, por ejemplo, tu cepillo exfoliante y el guante que viene con algunos autobronceadores.
¿Cómo evitar las temidas manchas naranjas de autobronceador?
Para evitar que aparezcan manchas naranjas tras aplicar el autobronceador no podemos saltarnos el paso de exfoliar la piel previamente. Estas manchas no son más que una acumulación de producto en una área concreta de la piel, y se debe a una distribución poco uniforme.
Si quieres un poco de ayuda extra para evitar que ocurra, aplica tu crema hidratante en codos, rodillas y otras áreas difíciles para que se difumine con mayor facilidad.
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