Estos son los 12 mejores champús sin sulfatos que encontrarás
Superhonesta participa en varios programas de marketing de afiliación: si realizas una compra a través de nuestros enlaces recibimos una comisión sin coste añadido para ti.
Es innegable: los champús sin sulfatos están viviendo su momento de gloria. La sabiduría popular que impera ahora mismo nos dice que los sulfatos en el champú son el equivalente cosmético al hijo del demonio. Pero, ¿qué hay de cierto en todo esto? ¿Es realmente necesario desterrar nuestros champús de toda la vida para dejar paso a la cosmética «sin» de una vez por todas?
Dejando de lado este debate, tampoco podemos negar que muchos consumidores los prefieren por su amabilidad con el cabello, y existen buenísimos champús sin sulfatos que puedes añadir a la repisa de tu baño con total tranquilidad, por eso hemos seleccionado los mejores. Vamos a ahondar un poco en todo este tema para despejar todas las dudas.
¿De qué se encargan los sulfatos en los champús?
Los sulfatos son los tensioactivos responsables de separar el sebo y residuos de tu cuero cabelludo y fibra capilar. Dicho de otra manera: sería la parte de la fórmula de tu champú encargada de limpiar la suciedad de tu cabecita, el «quitagrasas» de la higiene personal.
¿Cómo saber si un champú tiene sulfatos?
Para saber si un champú contiene sulfatos debemos mirar la lista de ingredientes INCI en el reverso del envase. Los encontramos bajo los nombres de sodium lauryl sulfate (SLS), sodium laureth sulphate (SLES) y el sodium coco sulphate (SCS), siendo el primero el más potente de todos ellos.
¿Son malos los sulfatos?
Los sulfatos no son ni buenos ni malos: tienen la función de limpiar. Llevan muchísimos años utilizándose en las fórmulas de nuestros geles de ducha, jabones de manos, champú… Lo que ocurre es que hace tiempo se difundieron bulos sobre que causaban cáncer (spoiler: no es cierto) o que resecaban demasiado el cuero cabelludo (esto último es cierto en algunos casos). Desde entonces muchas marcas se han sumado al carro de la cosmética «sin sulfatos», porque los consumidores lo pedían.
La realidad es que tan solo son ingredientes, y la eficacia de un producto depende de la fórmula completa. Sí es cierto que existen champús con demasiado SLS que pueden causar irritaciones en pieles sensibles, pero en la mayoría de casos no es necesario tirar un champú que te gusta por leer este ingrediente en el INCI. Además, suelen acompañarse de ingredientes acondicionadores para compensar la pérdida de grasa en el cabello después del lavado. De hecho, la mayoría de mis champús favoritos llevan sulfatos.
¿Cuándo sí usar un champú sin sulfatos?
Existen algunos casos en que sí puede funcionarte bien el uso regular de un champú sin sulfatos, aunque insisto, siempre depende del conjunto de la fórmula (hay algunos ingredientes alternativos a los sulfatos que pueden ser incluso más irritantes que el SLS). Y recuerda: en general tendrás que trabajarlos mucho sobre tu cuero cabelludo para conseguir una limpieza profunda.
- Si tienes el cuero cabelludo sensible: si notas que la mayoría de champús que has usado te provocan picor o descamación en el cuero cabelludo, entonces podrías darle una oportunidad a los champús sin sulfatos, no sin antes visitar a tu dermatólogo. Dato curioso: muchos champús de farmacia especiales para evitar irritaciones, llevan sulfatos (y funcionan genial).
- Si has decolorado o teñido tu cabello: sí es cierto que los surfactantes fuertes como el ya mencionado SLS pueden retirar el pigmento del cabello con mayor facilidad que otros ingredientes, pero al final depende de la cantidad que se haya usado en la fórmula. Existen buenísimos champús profesionales para cabello teñido que llevan sulfatos y respetan el color, así que esta norma no siempre se cumple.
- Si tu cabello es rizado, seco o se encrespa con facilidad: cualquier cabello que muestre signos de deshidratación puede beneficiarse de varios lavados mensuales con champús sin sulfatos. El pelo rizado suele necesitar un lavado más suave y menos espumoso, por eso se popularizó el co-wash hace un tiempo (que por suerte ha perdido popularidad).
- Si te has hecho un alisado de keratina recientemente: sí, se cree que los sulfatos pueden «levantar» el alisado de keratina más rápidamente de lo normal, así que úsalos menos a menudo.
Por qué sí deberías usar champú con sulfatos
Si has decidido comenzar a usar champús sin sulfatos, es posible que necesites usar un champú normal un par de veces al mes. ¿El motivo? Los agentes limpiadores de los champús sin sulfatos funcionan distinto y no limpian tan bien. Por lo tanto, si notas que tu cabello lo necesita porque tu champú es de muy baja detergencia (y sobre todo si tienes el cabello graso o utilizas muchos productos, como el champú seco), será necesario que hagas una limpieza profunda del cuero cabelludo un par de veces al mes.
1. Champú sin sulfatos para cuero cabelludo sensible Nodé de Bioderma
El champú sin detergentes Nodé de Bioderma suele gustar muchísimo por su gran eficacia y suavidad a la hora de lavar el cabello. Es muy ligero y más que adecuado para el lavado frecuente (incluso diario) del cabello fino, que tiende a engrasarse con rapidez. Es muy cuidadoso con el cuero cabelludo sensible, con picores. El único inconveniente es quizás su textura líquida, que puede resultar incómoda a la hora de aplicarlo.
2. Champú sin sulfatos para cabello rizado Mad about Curls de Schwarzkopf
Este producto se usa de forma un poco distinta al típico champú, pero vale mucho la pena si tienes el pelo rizado y con tendencia a la sequedad. Es un limpiador que apenas hace espuma, así que sería la versión eficaz del famoso co-wash. Aplica unos pumps por todo tu cabello mojado, déjalo reposar unos minutos y masajea. Luego aclara con agua. ¡Voilà!
3. Champú sin sulfatos de Dalire
Este champú sin sulfatos, siliconas, colorantes ni parabenos de Dalire causa furor en Amazon y es una de nuestras opciones naturales favoritas. Lleva tensioactivos que son de origen vegetal, del coco. Es con lo que se hace la espuma del champú. Limpian con amabilidad, además de extracto de pomelo rico en vitamina C y ácido fólico, que cuida y estimula la piel del cuero cabelludo. Además, tiene un ligero olor cítrico y su formato pump es muy cómodo.
4. Champú sin sulfatos para cabello teñido o delicado Fluidealiste de Kérastase
Si tu cabello es muy proclive al encrespamiento, prueba el champú de la gama Bain Fluidealiste de Kérastase. Alisa y deja el pelo súper manejable y fácil de peinar (si lo que quieres es volumen, no es tu champú). Es un gran complemento si te has sometido recientemente a un alisado de queratina.
5. Champú libre de sulfatos Be Curly de Aveda
Otra genial opción para lavar el cabello rizado de forma suave es usar el conocido Be Curly de Aveda, un champú co-wash que gusta muchísimo en general. Esta línea de productos es adecuada para cabellos ondulados o rizados que quieren conseguir definición y resistencia ante el encrespamiento, pero siempre con un acabado natural y ligero, sin añadir excesivo peso al rizo.
6. El champú de Olaplex Nº4 para cabello muy dañado
Sí, el famoso champú de Olaplex no contiene sulfatos, pero es capaz de conseguir una sensación de limpieza y una fina espuma muy agradable, parecida a la que se consigue con champús que incluyen SLS. Está indicado para todo tipo de cabello, pero es especialmente bueno para ti si lo tienes seco, maltratado o decolorado.
Review completa: Opinión sobre el champú Nº4 de Olaplex
7. Champú de uso frecuente DEDE de Davines
El champú DEDE de la sostenible de la marca Davines es perfecto para aquellos tipos de cabello que requieren un lavado diario, como los cabellos grasos. Limpia de forma suave, no lleva sulfatos y el principal inconveniente es que puede parecerle demasiado secante a los cabellos secos. El truco es utilizar siempre un acondicionador en las puntas después de usarlo.
8. Champú sin sulfatos low cost Argan Oil de HASK
El champú reparador con aceite de argán de HASK es apto para todos los bolsillos, y hace un excelente trabajo pese a no llevar sulfatos. Para dejar el cabello suave y manejable incorpora glicerina, panthenol y aceite de argán.
9. Champú sin sulfatos nutritivo INDIA de ICON
Si buscas un champú suavizante y apto para cabellos secos, gruesos y abundantes, este es tu champú. Incorpora manteca de karité, aceite de moringa y argán para un plus de nutrición. Además, huele de maravilla con su aroma inspirado en la India.
10. Champú sin sulfatos hidratante de Shea Moisture
Sí, Shea Moisture es una marca muy popular entre las chicas de cabello rizado, pero no por ese motivo debes prohibirte utilizar tus productos si tu cabello no entra en esa categoría. ¿La razón? Sus fórmulas son ultra suaves, amables con el cabello delicado y profundamente hidratantes. Si tienes el cabello seco prueba con el champú de hidratación intensiva con miel manuka y aceite de mafura. No pesa ni apelmaza pese a su contenido en manteca de karité.
11. Champú sin sulfatos para cabello fino Biotin & Collagen de OGX
Las cabecitas con cabello fino y sin volumen adorarán este champú de OGX. Incorpora colágeno y proteína de trigo hidrolizada, ingredientes que promueven la apariencia de un cabello más denso y voluminoso. Limpia con suavidad, huele de maravilla y además es low cost.
12. Champú sin sulfatos de Herbal Essences
Si tienes el cabello normal o graso, este champú low cost de Herbal Essences puede convertirse en tu aliado perfecto. Contiene agentes limpiadores suaves que en combinación con el jugo de aloe vera hidratan el cabello a la vez que retiran los residuos acumulados del día. La sensación de utilizarlo es realmente refrescante.
13. Champú alisador sin sulfatos de Sisley
Déjame decirte que el tacto y aroma de este champú de lujo es una pasada. Tiene un formato loción que forma una fina espuma, lava con extrema suavidad y es como una caricia para el cuero cabelludo. Ayuda a alisar la fibra capilar y a evitar el encrespamiento.
Contiene aceite de moringa, de ricino, de karité, además de vitaminas y minerales y Alfa-Bisabolol, un ingrediente súper calmante. Si lo pruebas es muy probable que repitas.